sábado, 28 de abril de 2012

El otro lado

Bajo el montón de abrigos colgados en el perchero que lo disfrazan de árbol otoñal que se resiste a dejar caer sus hojas, he encontrado una bandolera que solía llevar hace unos años.
En el interior, entre otros cachibaches y bien dobladito he encontrado un pequeño tesoro que me regaló una vieja amiga mía, cuando aún eramos unos desgarbados veinteañeros.
Creo que este es un buen rincón para guardarlo, antes de que algún pececillo de plata lo devore por completo.



"No esperamos que la gente empatize con lo que no es poco corriente.  [Ese elemento trágico subyace al hecho de la repetición, y no se ha forjado como parte de la emoción de la humanidad, quizás porque nuestro marco mental no podría resistirlo.] Si tuviésemos la visión y la sensación de todo lo ordinario de la vida humana, sería como escuchar la hierba y el latido del corazón de la ardilla; moriríamos al escuchar el rugido oculto al otro lado del silencio."

George Eliot

miércoles, 18 de abril de 2012

Hasta la vista, Marvin II.


Aquí está, este pequeñajo que no tiene ni dos meses, disfrutando del sol de primavera.

Hoy, lo hizo por última vez.

Como cada día salió de paseo con su clan, pero hoy no volvió.

Maese Raposo decidió que sería la comida perfecta para su camada y decidió darle muerte y llevarlo a su guarida.


Que lástima.
A Marvin II, que fue un cabrito prematuro, tuvimos que ayudarle a mamar, darle biberón durante dos semanas y lo hemos visto crecer, corretar, brincar y engordar, cada día. Incluso empezaban a salirle ya sus cuernecillos.

Al mismo tiempo entiendo que es un sacrificio.

El precio que hay que pagar para poder seguir disfrutando de la presencia casi invisible del Maese, que se resiste simplemente a desaparecer y nos da una lección de supervivencia y adaptación, pese a lo complicado que se lo ponemos cada día.

No te guardo rencor, Maese, lo sabes bien. Admiro tu ingenio y tu perseverancia.
Pero te lo pondré un poco más difícil la próxima vez.
Soy humano, claro.

Es una insensatez no darle a los espíritus de la Naturaleza lo que es suyo. Lo que no les ofrezcas de buena gana, ellos sabrán arrebatártelo.

jueves, 5 de abril de 2012

Regalos de lluvia

En la correría con la manada de esta tarde, tras estos mágicos días de lluvia, nos hemos encontrado con una vieja amiga que hacía unos veinticinco años que no veía... Y me ha susurrado al oído algo sobre la llegada de la primavera.